Inspirada por el estilo del vino elaborado en la comuna francesa de Chateauneuf-du-pape, la bodega Bonny Doon de California, decidió rendir homenaje a dicho pueblo galo nombrando a su vino en base a un interesante capítulo de su pasado que involucra la presencia de OVNIs.
A finales de 1954, los reportes de avistamientos OVNI en toda Francia comenzaron a propagarse. Y pronto estos hechos inusuales se volvió una inquietud para los ciudadanos.
La forma más común de la naves reportadas surcando los cielos, era de cigarro, llamado “Cigare Volant” por los franceses, es decir, cigarro volante.
A pesar que no hubo reportes en la prensa sobre encuentros cercanos procedentes de Chateauneuf-du-pape, la gente de esta localidad estaba tan preocupada por los avistamientos y los efectos que los OVNIs provocaban en sus vinos, que el alcalde decidió vetar el aterrizaje de OVNIs en los viñedos.
Esta controvertida decisión fue reflejada en los periódicos de la época, como muestra este recorte del Le Haut-Marnais Républicain, de Chaumont, Francia.
“¡PLATILLOS VOLADORES!
El Sr. Alcalde no se anda con chiquitas, los ‘platillos o cigarros’ que aterricen en Chateauneuf-du-Pape serán mantenidos en custodia si la policía rural los atrapa.
Avignon.— El Sr. Lucien Jeune, alcalde de Châteauneuf-du-Pape, acaba de promulgar el siguiente decreto, el cual fue aprobado por el prefecto de la Vaucluse y ya entró en vigencia:
El Alcalde de Chateauneuf-du-Pape decreta:
Artículo 1.- El sobrevuelo, el aterrizaje y el despegue de las naves conocidas como platillos voladores o cigarros volantes, cualquiera sea su nacionalidad, queda prohibido en el territorio de la comuna.
Artículo 2.- Cualquier nave, conocida como platillo volador o cigarro volante, que aterrice en el territorio de la comuna, será inmediatamente detenida y mantenida en custodia.
Artículo 3.- El guardia forestal y el policía de la ciudad a cargo, tendrán la obligación de poner en ejecución este decreto.”
Al descubrir esta llamativa historia, Bonny Doon nombró a su querido vino de Chateauneuf-du-pape, Le Cigare Volant.
La etiqueta de atrás del vino dice:
“En 1954 el consejo del pueblo de Chateauneuf-du-pape entró en estado de perplejidad y aprehensión debido al temor que los platillos voladores o ‘cigarros volantes’ hagan daño a sus viñedos al aterrizar en ellos. Así que, para hacer las cosas bien, ellos crearon una ordenanza para prohibir el aterrizaje de platillos o cigarros voladores en sus viñedos. La ordenanza también declara que cualquier objeto volador que haya descendido será detenido e inmediatamente llevado al depósito municipal. No es de extrañar que este vino sea un logro estelar. La composición de nuestro Cigarro Volante está basada en ingredientes tradicionales de Chateauneuf-du-pape…”
Tal vez en un futuro “exo-burocrático” la gente de esta comuna francesa sea reconocida como la primera en escribir una ley cósmica.
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