Nueva Suabia, la Fortaleza Secreta Aria 卐

 "La flota alemana de submarinos está orgullosa de haber construido para el Führer, en otra parte del mundo, un Shangri-La, una fortaleza inexpugnable..." -Karl Dönitz (1943) Gran Almirante de la Marina Alemana.

Nueva Suabia (Neuschwabenland en alemán) es una zona de la Antártida entre 10° O y 20° E, en la Tierra de la Reina Maud. Fue explorada por una expedición alemana (1938-1939), quien descubrió zonas libres de hielo con cálidos lagos de agua dulce y signos de vegetación, pero Alemania no hizo ningún reclamo territorial FORMAL. El partido NAZI, sin embargo, procedió a construir de forma encubierta masivas bases subterráneas secretas en la profundidad del hielo de la Antártida (ver Base-211). Continuamente enviaron hombres y materiales al polo sur durante los años de guerra. Karl Dönitz, Gran Almirante de la Marina Alemana, declaró en 1943: "La flota alemana de submarinos está orgullosa de haber construido para el Führer, en otra parte del mundo, un Shangri-La, una fortaleza inexpugnable..."

Superados por la máquina industrial de guerra de los aliados, la elite NAZI tuvo que renunciar a Alemania en 1945 para detener el bombardeo de su población civil. Aunque existen rumores de que Alemania había desarrollado la bomba atómica antes que los aliados, pero Hitler se negó a utilizar la arma de destrucción masiva contra poblaciones Arias enteras. En cambio, ofertas secretas fueron alcanzadas permitiendo un intercambio de tecnología por la evacuación segura de los cientos de miles de Nazis en América del Sur, o empleados por la NASA (ver Operación Paperclip). La élite Nazi se refugió en su fortaleza de la Antártida.

El cuerpo de Hitler nunca fue recuperado, y ningún miembro del partido NAZI se rindió oficialmente. Esta es la razón por la que el Secretario de Defensa, James Forrestal, envió una fuerza naval con la tarea de invadir la Antártida, incluyendo al almirante Nimitz, al Almirante Krusen y al Almirante Byrd, llamada "Operación Highjump". Más de 4,500 tropas militares de los EE.UU., Gran Bretaña y Australia, que constaban de tres armadas navales de combate, partieron de 3 ubicaciones separadas en 1946. El buque al mando del Almirante Byrd dirigió el ataque, el rompehielos "Neptuno", junto con la nave catapulta "Isla Pino", el destructor "Brownsen", el portaaviones "Mar Filipinas", el submarino estadounidense "Sennet", dos buques de apoyo "Yankee" y "Merrick", y dos buques tanque "Canisted" y "Capacan", el destructor "Henderson" y un barco hidroavión "Currituck". A Byrd se le dio fondos ilimitados y 8 meses para completar la operación.

Fue un baño de sangre. A su humillante derrota en menos de 2 semanas, el Almirante Byrd declaró que ahora era: "necesario para los EE.UU. el tomar acciones defensivas contra los enemigos aéreos que provienen de las regiones polares".

Los Nazis de la Antártida fueron capaces de desarrollar su nave espacial (Vril) muy por delante de cualquier otra cosa poseída por los EE.UU., y rápidamente derrotaron el ataque masivo después de la "2 ª Guerra Mundial" por las fuerzas militares aliadas, quienes temerosamente se retiraron después de sufrir daños sustanciales y fuertes bajas.

Los medios de comunicación controlados por Rothschild/Rockefeller ha promovido una narración falsa en relación con los acontecimientos de la 2 ª Guerra Mundial durante los últimos 70 años. Mientras que el gobierno de Estados Unidos continúa suprimiendo esta tecnología de energía libre "Vril", mantenimiento nuestra economía global esclavista a base de petróleo, sin embargo, los Arios (卐) que escaparon han ampliado un enorme programa espacial secreto, sin la necesidad de la gasolina o petróleo.

Escrito por Robert Sepehr 

Robert Sepehr es un escritor, productor y antropólogo. Especializado en la lingüística, arqueología y la paleobiología. Un duro crítico de la teoría Fuera-de-África, Sepehr da argumentos difusionistas alternativos que a menudo implican a civilizaciones antediluvianas avanzadas, sociedades ocultistas secretas, mitología antigua, alquimia y astroteología.

Más sobre el autor:

Antropólogo desafía la Teoría de los Orígenes Humanos



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