El 30 de abril de 1945, Adolf Hitler cometió suicidio en su búnker subterráneo. Su cuerpo fue descubierto más tarde e identificado por los soviéticos antes de ser trasladado a Rusia. ¿Es realmente posible que los soviéticos han estado mintiendo todo este tiempo, y que la historia a sido reescrita a propósito?
Nadie lo creía, pero los documentos publicados del FBI dicen que así pudo haber sido.
Estos documentos están comenzando a demostrar que el suicidio de Hitler y Eva Braun fue falsificado, y que escaparon de Alemania, y vivieron una vida bucólica y pacífica en las hermosas colinas de las montañas de los Andes, y no sólo eso, al parecer ellos tuvieron la ayuda del propio director de la OSS, Allen Dulles.
En un documento del FBI de Los Ángeles, se revela que la agencia estaba al tanto de un submarino misterioso que iba en camino hacia la costa de Argentina lleno de oficiales Nazis de alto nivel.
En una carta de Los Ángeles a el Bureau en agosto de 1945, un informante no identificado acordó intercambiar información por asilo político. Lo que él dijo a los agentes era impresionante.
El informante no sólo sabían que Hitler estaba en Argentina, el había también sido uno de los cuatro hombres confirmados que se habían reunido con el submarino alemán. Al parecer, dos submarinos habían desembarcado en la costa de Argentina, Hitler y Eva Braun se encontraban a bordo del segundo.
El gobierno Argentino dio la bienvenida al ex dictador alemán, y también le ayudó en su escondite.
El informante también dio instrucciones precisas de los pueblos por los que Hitler y su partido habían pasado, y también detalles físicos creíbles referentes a Hitler.
Aunque por razones obvias el informante nunca es nombrado en los documentos del FBI, fue lo suficientemente creíble para ser creído por algunos agentes.
El FBI trató de ocultar el paradero de Hitler.
Aun así con una descripción física detallada y las instrucciones, el FBI nunca dio seguimiento. Incluso había pruebas del lugar donde se encontraba el submarino alemán U-530 en la costa argentina, y montones de historias de testigos oculares que vieron al oficial alemán llegar, nadie investigó.
Junto con los documentos del FBI existe un testigo que describe el paradero de Hitler en Argentina, más evidencia está saliendo a la luz demostrando que Adolf Hitler y Eva Braun no murieron en ese búnker.
En 1945, el Agregado Naval en Buenos Aires informó a Washington que había una alta probabilidad de que Hitler y Eva Braun acababan de llegar a Argentina. Esto coincide con los avistamientos del submarino U-530.
Unas pruebas añadidas que vienen en forma de artículos de prensa detallan la construcción de una mansión de estilo bávaro en las faldas de las montañas de los Andes.
En otra prueba, el arquitecto Alejandro Bustillo, describe acerca de su diseño y construcción de la nueva casa de Hitler, la que fue financiada por los ricos inmigrantes alemanes anteriores.
La evidencia irrefutable de que Hitler escapó:
Quizás la evidencia más representativa de que Hitler sobrevivió a la caída de Alemania se encuentra en Rusia. Con la ocupación soviética de Alemania, los supuestos restos de Hitler fueron rápidamente ocultados y enviados a Rusia, para nunca ser vistos de nuevo. Fue hasta 2009, cuando se le permitió al arqueólogo Nicholas Bellatoni del estado de Connecticut, el realizar pruebas de ADN en uno de los fragmentos de los cráneos recuperados.
Lo que descubrió desató una reacción a través de la inteligencia y las comunidades académicas. El ADN no coincidió con ningun ejemplo del ADN de los familiares de Hitler ni de Eva. Entonces la pregunta es, ¿qué descubrieron los soviéticos en el bunker, y donde se encuentra Hitler?
Incluso el ex general y presidente Dwight D. Eisenhower escribió a Washington.
En 1945, el diario Stars and Stripes citó al entonces General Eisenhower diciendo de que existía la posibilidad real de que Hitler vivia con seguridad y comodidad en Argentina. Stalin también expresó sus preocupaciones.
¿Es posible?
Con toda la nueva evidencia saliendo a la luz, es posible e incluso probable que no sólo Hitler escapó de Alemania, él tuvo la ayuda de la comunidad internacional de inteligencia. Los documentos del FBI prueban que eran conscientes de la presencia de Hitler en Argentina, y también estaban ayudando a encubrirlo.
No sería la primera vez que la OSS ayudara a un alto oficial Nazi escapar del castigo y captura. Como prueba tenemos la historia de Adolf Eichmann, quien estaba ubicado en Argentina en la década de 1960.
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